Never Say Goodbye: Volvemos!

Bueno, el fin de semana terminó y ya mañana estaré con vosotros otra vez como siempre, aunque sé que con Leire habéis estado en buenas manos!

Sin embargo ahora que ya volvemos, me gustaría explicaros porque os he abandonado estos días... aunque igual me poco un poco pesado.

Ya sabéis porqué abrí este blog y también sabéis la cantidad de cosas buenas que ha ido trayendo. Todos los seguidores, la colaboradora chachi... En fin, muchas cosas. Lo que nunca imaginé es que la cosa más maravillosa del mundo también iba a salir de este blog (sí, lo sé soy un moñnas "but baby that´s just me"). Y resultó eso, que con el blog, una bonjovera de estas locas apareció y entonces mi vida se empezó a convertir un poco en Living on a prayer; yo era Tommy y ella era Gina, y Tommy y Gina nunca se rindieron y espero que nosotros tampoco. Y toda esta locura, todo el blogging on a prayer, toda esta aventura, empezó un poco a lo tonto y ahora fíjate por dónde.

Resulta que algunas veces la vida te pilla por sorpresa y esta ha sido una de esas. Cuando no crees en prácticamente nada y de pronto, empiezas, precisamente a eso, a vivir en una oración. Este fin de semana no he estado con vosotros pero he tenido la mejor excusa del mundo. Espero que me disculpéis por ponerme tan moñas a veces, pero bueno, así soy yo y creía que merecíais saber esta ausencia.

En cuanto a lo demás... A Leire muchas gracias por mantener la llama viva, a vosotros que habéis seguido comentando y esta bonjovera loquita de la que hablo, bueno... no recordaba que despedirse en las estaciones/aeropuertos/loquesea fuera tan duro, pero ese concierto de Bon Jovi en Madrid está a la vuelta de la esquina y ahora mismo que Richie Sambora esté o no, es lo que menos me importa. Además, nosotros estamos a mitad de camino y eso, Never Say Goodbye... Aquí te dejo/ os dejo una pequeña dedicatoria!